El proyecto que inicialmente nació como una plataforma de trading cuantitativo para criptomonedas y acciones ha evolucionado hacia una red descentralizada que capta potencia de cómputo de GPU para responder a la creciente necesidad de servicios de inteligencia artificial y aprendizaje automático. Io.net ha puesto en marcha una red de prueba que recopila potencia de cómputo de GPU desde diversos centros de datos, mineros de criptomonedas y proveedores de almacenamiento descentralizado, buscando reducir significativamente los costos asociados a estas fuentes, cuyo precio ha aumentado con el avance de la inteligencia artificial y el aprendizaje automático.
Avances en la Red Descentralizada de Io.net: Impacto en la Computación Futurista
La red descentralizada de Io.net representa un avance significativo en el manejo y utilización de recursos de computación con GPU. Al distribuir el acceso a estos recursos valiosos a través de una plataforma descentralizada, Io.net está posibilitando una democratización del acceso a la tecnología de inteligencia artificial. Este enfoque no solo reduce los costos asociados con el alquiler de GPUs, sino que también mejora la eficiencia en la utilización de los recursos de cómputo.
Este modelo descentralizado se contrasta fuertemente con los sistemas centralizados tradicionales, donde unas pocas grandes corporaciones controlan la mayoría de la potencia de procesamiento disponible. En cambio, Io.net permite que individuos y pequeñas empresas que poseen hardware de GPU participen directamente en el mercado, rentando su capacidad de procesamiento no utilizada. Esto no solo genera ingresos adicionales para los propietarios de GPU, sino que también acelera los procesos de innovación al hacer la tecnología de aprendizaje automático más accesible para una gama más amplia de usuarios y desarrolladores.
Además, la utilización de la cadena de bloques de Solana para facilitar las transacciones asegura que el sistema sea transparente, seguro y eficiente. Los pagos en criptomonedas como SOL y USDC simplifican las transacciones internacionales, eliminando la necesidad de intermediarios costosos y aumentando la velocidad de las operaciones.
Innovación y Reducción de Costos
En una entrevista exclusiva con Cointelegraph, Ahmad Shadid, CEO y cofundador de Io.net, explicó que la idea surgió durante un hackathon de Solana a fines de 2022. La empresa estaba desarrollando una plataforma de trading cuantitativo que se apoyaba fuertemente en la potencia de cómputo de GPU para sus operaciones de alta frecuencia, pero se enfrentaba a los elevados costos de alquilar esta capacidad de cómputo.
El equipo de Io.net se encontró con el desafío de alquilar hardware de GPU de alto rendimiento, con el precio de renta promedio de una sola tarjeta NVIDIA A100 rondando los USD 80 diarios. La necesidad de más de 50 de estas tarjetas para operar durante 25 días al mes podría superar los USD 100,000.
Una solución emergió al descubrir Ray.io, una biblioteca de código abierto utilizada por OpenAI para distribuir el entrenamiento de modelos como ChatGPT en más de 300,000 CPU y GPU. Esta herramienta optimizó la infraestructura del proyecto, permitiendo un desarrollo rápido del backend en apenas dos meses.
Demostración y Ventajas Competitivas
Shadid presentó la red de prueba en funcionamiento de Io.net en la Cumbre Ray Summit sobre inteligencia artificial en septiembre de 2023, resaltando cómo el proyecto agrega potencia informática ofrecida en forma de clústeres para cubrir casos de uso específicos de inteligencia artificial o aprendizaje automático.
“Este modelo permite que Io.net ofrezca computación con GPU hasta un 90% más barata que los proveedores tradicionales, y brinda una potencia informática virtualmente ilimitada”, comentó Shadid. Además, la red descentralizada empleará la blockchain de Solana para manejar los pagos en SOL y USD Coin (USDC) a los ingenieros de aprendizaje automático y mineros que alquilen o suministren potencia informática.
“Cuando los ingenieros de aprendizaje automático pagan por sus clústeres, estos fondos se transfieren directamente a los mineros que contribuyeron con sus GPUs al clúster, con una pequeña tarifa de red asignada al protocolo de Io.net”, añadió Shadid. El plan futuro incluye el lanzamiento de un sistema de tokens nativos duales, IO e IOSD, que recompensarán a los mineros por ejecutar cargas de trabajo de aprendizaje automático y mantener la operatividad de la red.
Shadid también comparó Io.net con servicios de nube centralizados como Amazon Web Services (AWS), explicando que mientras AWS es como United Airlines, que posee los aviones, Io.net actúa más como Kayak, facilitando la reserva de vuelos, o en este caso, el alquiler de potencia de cómputo.
Con una demanda de GPU estimada en aumentar diez veces cada 18 meses, Shadid señala que frecuentemente no hay capacidad suficiente para satisfacer la demanda, lo que resulta en largos tiempos de espera y precios elevados. Sin embargo, la iniciativa de Io.net pretende democratizar el acceso al cómputo de GPU, ofreciendo una solución más eficiente y económica frente a los gigantes tecnológicos.
